Historia

UN PASEO POR LA HISTORIA DEL COLEGIO (1889-2020)

El contrato de Fundación, las Escrituras de los inmuebles adquiridos por la Compañía de las Hijas de la Caridad, documentos fotográficos, el testimonio oral de las hermanas, las actas y la meticulosa labor de recopilación de documentos por parte de Sor Mª esperanza Tobar González y Sor Dolores González Gª-Gutiérrez han hecho posible la reconstrucción de parte de la historia de este colegio centenario.

1889: 1ª FUNDACIÓN

El 30 de agosto de 1889 se funda el Colegio San José por iniciativa del Obispo Prior de la Órdenes Militares de Ciudad Real, Ilmo. Sr. D. José María Rancés y Villanueva, quien, con grandes afanes e inquietudes apostólicas, lo colocó bajo la protección de San José. La imagen del Santo Patrón, emblema del Colegio, ostenta con orgullo el escudo de su insigne fundador.

Monseñor Rancés confiaba la dirección de la nueva institución a las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul. A comienzos de septiembre, las primeras siete Hermanas fundadoras vinieron a encargarse de él, siendo Sor Paz Aranda la Superiora de esta pequeña Comunidad.

El edificio original del Colegio de la calle Calatrava se inauguró con toda solemnidad el 15 de septiembre de 1889. El Boletín Eclesiástico de septiembre del citado año destacó la importancia de aquel acontecimiento como algo transcendental en la vida de la capital.

1889-1926: CARISMA VICENCIANO Y COMIENZO DE NUESTRA ANDADURA

La idea de su fundador fue destinarlo sólo para escuelas populares gratuitas. Sin embargo, la insistencia de familias de clases acomodadas de Ciudad Real y la necesidad de conseguir recursos para su sostenimiento le decidieron a poner, también, enseñanzas pensionadas, convirtiendo al Colegio en un centro de niñas de todas clases sociales y de cultura superior. Los Estatutos, redactados por el propio Monseñor Rancés en 1890, recogían en diez minuciosos capítulos lo que iba a ser su identidad:

  • Sería dirigido por las Hijas de la Caridad que, desde el principio le imprimieron su Carisma Vicenciano: educación cristiana, amor a los necesitados y apostolado misionero.
  • Acogería a niñas internas y externas pensionistas, externas gratuitas y párvulos de ambos sexos.
  • Las Hermanas impartirían religión y moral; lectura, caligrafía, gramática, aritmética, historia, geografía, urbanidad y economía doméstica; música, dibujo, francés y todo género de labores.

Desde el primer momento la fundación del Colegio fue acogida con verdadero cariño ciudad. Se abrieron cuatro aulas que contaron con la cifra de 200 alumnas:

  • Dos aulas para niñas externas gratuitas, mayores de siete años, naturales o con vecindad de sus padres en Ciudad Real.
  • Dos aulas para niñas pensionistas externas e internas.

El plan de estudios comprendía conocimientos generales de Enseñanza Primaria y asignaturas complementarias de labores, música, pintura e idiomas.

1926-1940: 2ª FUNDACIÓN

El constante aumento de matrícula va a determinar sucesivas ampliaciones que se realizarán para poder admitir a todas las niñas que lo solicitaban y que venían a estudiar de los pueblos de la provincia.

En 1926, por la intervención del Obispo Prior de las Órdenes Militares de Ciudad Real, Ilmo. Sr. D. Narciso Esténaga y Echevarría, considerado segundo fundador del Colegio, y de los Superiores de la Congregación se firmó un Convenio-Escritura que cedía a la Compañía de las Hijas de la Caridad el usufructo perpetuo del Colegio y sus anejos y de los inmuebles pertenecientes a la fundación.

Desde el 13 de septiembre de 1926, el Colegio San José entraba en una nueva época por la generosidad de su Obispo y por la iniciativa de las Hijas de la Caridad, siendo Superiora de la Comunidad Sor Bárbara Pou, que condujo a su primera ampliación.

A expensas de la Compañía, se edificó una nueva planta sobre el piso principal del edificio de la calle Calatrava con esquina a la calle Luz, acometiendo obras como las que se indican:

“instalación de aguas potables, nuevos retretes, baños y duchas, conducción de aguas sucias, renovación de pavimentos, traslado de la Capilla, reforma de la portería, formación de cuatro clases separadas por tabiques de cristal, establecimiento de la enfermería y, finalmente, instalación por toda la casa de calefacción central de agua caliente”.

Las enseñanzas también se ampliaron. Se cursaban las de carrera como Magisterio y Bachillerato Elemental; labores y economía doméstica, corte y confección de prendas, teneduría de libros, francés, solfeo y piano, mecanografía y taquigrafía, dibujo y pintura. Diez y seis Hermanas asumieron la docencia y la gestión del mismo, que duplicó su número con 414 alumnas.

La ingente labor cultural y el fruto de estas primeras décadas de existencia quedó patente en madres de familias cristianas, maestras ejemplares y jóvenes que optaron por la vocación religiosa. Así lo refiere el informe redactado entre 1926 y 1929 por los inspectores de Primera Enseñanza de Ciudad Real y su provincia, D. Gaspar Sánchez y D. Emiliano Morales con el título de Memoria de los trabajos realizados en el Colegio de San José de la Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, españolas, de Ciudad Real, por las alumnas y profesoras del mismo:

“Independientemente de la labor educativo-instructiva diaria de carácter ortodoxo y referente a la integridad de las materias que comprende el vigente plan de estudios escolares, se realizan ejercicios diarios de gimnasia sueca y rítmica, frecuentes paseos y excursiones con fines científicos, morales y artísticos. Semanalmente, proyecciones cinematográficas para la educación y enseñanza intuitiva. Conferencias de carácter moral y religioso. Ejercicios de lectura explicada, trabajos de redacción y composición, de cálculo mental con números concretos y manejo del diccionario castellano por la generalidad de las alumnas retribuidas y gratuitas. Llévase en todos los grados el diario de clase y el libro de deberes redactado por las niñas, y finalmente se da a las enseñanzas un carácter práctico, empleando el método activo, procedimiento lógico y forma intuitiva en la generalidad de las materias y de conformidad con los programas y reglamento de este Colegio. El centro de interés y el importante problema de las actitudes se desarrolla asimismo de modo satisfactorio, obteniendo buenos resultados según se comprueba con los datos siguientes:

  • En el año anterior ingresaron en la Escuela Normal de Maestras de Ciudad Real y en el Instituto Nacional de Segunda Enseñanza varias alumnas de este Colegio, sin que en su enseñanza interviniese ningún elemento que no perteneciese a este centro docente.
  • Hállanse preparando actualmente con los mismos fines cuarenta y seis alumnas que se examinarán en junio.
  • Hay un buen número de jóvenes que no recibieron otras enseñanzas que las de este centro, desempeñando en la actualidad Escuelas Nacionales, tenedurías de libros, Cajas de empresas mercantiles, etc., etc., y otras han hecho estudios, examinándose con muy buenas notas en el Real Conservatorio de Música y Declamación de Madrid. Se encuentran actualmente en diferentes Órdenes Religiosas – Hijas de la Caridad, Adoratrices, Dominicas, etc. – varias jóvenes que ingresaron en la sección de párvulos del Colegio y en él permanecieron hasta comenzar su piadoso ministerio.
  • Se han publicado, en el diario de Ciudad Real titulado Pueblo Manchego, muchas crónicas referentes a actos culturales, conferencias, veladas literarias y científicas, solemnes comuniones y otros actos cívico-cristianos que durante el curso actual se han verificado en este Colegio.
  • Se han realizado, durante el curso, muchos trabajos de cartografía, dibujos lineales, de adorno, de figura, cartas, documentos, cuadernos de problemas numéricos y gráficos y otras obras originales de las alumnas.
  • Inspectores de Primera Enseñanza han verificado exámenes con excelentes resultados… ante el Ilmo. Sr. Prior de la Órdenes Militares”

1927: EL Ropero

Comienza un voluntariado que se mantiene en la actualidad, adaptado a la realidad del siglo XXI. Obra social fundada, probablemente en ese año, por antiguas alumnas del Colegio. Unas sesenta socias activas se reunían los jueves bajo la dirección de las hermanas para coser todo tipo de prendas para los pobres que después eran repartidas en Pascua o durante el año, en casos de urgente necesidad. Admitió también socios protectores de ambos sexos con cuyas aportaciones llegó a tener un capital de mil pesetas en el primer año.

Fue su presidente el Ilmo. Sr. Obispo Esténaga y las señoritas fundadoras Esperanza López, Carmen Torrepando, Dolores Calero y Mercedes Saúco constituyeron la Directiva:

1936-1939.Paréntesis de la Guerra Civil 

Durante los años de la Guerra Civil, el Frente Popular transformó el Colegio en Hospital de Sangre. Las Hermanas, acogidas por familias de Ciudad Real y como seglares, prestaron su servicio atendiendo a los enfermos. Finalizada la contienda se hicieron cargo nuevamente de él. Trabajaron en su limpieza y en la recuperación del material y de los objetos que habían sido llevados a otros centros. No obstante, la casi totalidad de los archivos se perdieron o fueron destruidos.

El 2 de octubre de 1939, nuevamente, el Colegio San José reanudó con normalidad las clases, aunque con grandes estrecheces.

1940-1969: NUEVAS AMPLIACIONES Y NUEVAS ENSEÑANZAS

 De todas las ampliaciones que se han llevado a cabo en el Colegio, tres correspondieron al periodo comprendido entre 1940 y 1969 para adaptar el edificio a las nuevas necesidades y a las demandas de una sociedad en evolución.

Segunda ampliación en 1944

 La segunda ampliación se realizó con la compra de la casa número 19 de la calle Calatrava, contigua al Colegio, por la Superiora de la Comunidad Sor Ángeles Boix Javalones. Fue destinada a albergar cuatro aulas en la planta baja y a dormitorio de internas en la planta alta. La Iglesia actual está edificada sobre ese solar.

Por entonces, el Colegio rebasaba las 800 alumnas.

Tercera ampliación en 1950

La tercera ampliación se inició en abril de 1950 al adquirir, tras reiterados intentos, un solar propiedad del Ayuntamiento, siendo Alcalde de Ciudad Real D. José María Navas y Superiora del Colegio Sor Amparo Hernández Esteban, aunque fue Sor Joaquina Cuesta Arroyo quien continuó y concluyó las obras. Se construyeron tres pabellones de tres pisos cada uno en torno a un patio rectangular de 962 m² rodeado de galerías porticadas. Los tres pabellones fueron denominados con los nombres de Pabellón de San Vicente. Pabellón de Santa Luisa, situado enfrente del anterior, y Pabellón de la Virgen Milagrosa.

La matrícula llegó a las 1.000 alumnas, pues desde el curso académico 1945/46 el Colegio fue autorizado para impartir las enseñanzas de Bachillerato.

Cuarta ampliación entre 1964 y 1969

Comenzó su realización cuando la Compañía de las Hijas de la Caridad compró la casa número 17 de la calle Calatrava. Preparó la adquisición la Superiora Sor Concesa Costilla Labra y la realizó Sor Mercedes Maudes Villán, sucesora de la anterior. La compra del solar y los gastos de las obras de ampliación se sufragaron con la venta de la huerta que la Comunidad poseía en la Ronda de Calatrava, donde actualmente se halla una parte del Campus Universitario.

El conjunto del proyecto estaba formado por la Iglesia, el Gimnasio en el semisótano, el Salón de Actos y el Pabellón de Nuestra Señora de la Merced con la residencia de internas y de la Comunidad en cuya planta 5ª se construyó una terraza con una pequeña piscina para las colegialas.

La nueva Iglesia, con capacidad para más de 1200 personas, sustituyó a la entrañable Capilla que muchos recordaréis y que estaba ubicada donde hoy se encuentra la Biblioteca.

El acta de la bendición relata así el acontecimiento:

“El 27 de abril de 1967 fue un día de gozo para nuestro Colegio y para Ciudad Real. El Ilmo. Sr. Obispo de Ciudad Real, D. Juan Hervás Benet, inauguró y bendijo solemnemente la nueva Capilla, con la asistencia de las 700 alumnas mayores que llenaron el coro y la tribuna. La gran nave estuvo ocupada por numerosas Hijas de la Caridad, sacerdotes, madres y padres de familia, antiguas alumnas y gran número de invitados”. 

La Misa de Bendición fue oficiada por Monseñor Hervás y fueron concelebrantes los canónigos: D. Aurelio Gómez Rico, D. Ángel Vázquez, D. Narciso Martín de Almagro, profesor y capellán del Colegio, y D. José Díaz. Dirigió los cantos D. Antonio Lizcano.

AsÍmismo aporta datos importantes sobre el proyecto que fue realizado por el Arquitecto D. Jesús García del Castillo y sobre la construcción llevada a cabo por el Maestro de Obras D. Eugenio García del Castillo. Las vidrieras fueron trabajadas en un taller de Segovia y el gran relieve en piedra de la fachada, que representa de forma moderna la huida a Egipto de la Sagrada Familia, fue obra del escultor manchego Joaquín Donaire. Destacan, también, las tallas en madera del Cristo Crucificado, de estilo románico, colocado sobre el altar y las imágenes de la Santísima Virgen y de San José en los lados del Evangelio y de la Epístola respectivamente.

La pureza de líneas, los materiales empleados, su original y austera decoración responden al modelo de Iglesia difundida por el Concilio Vaticano II. De ella se ha dicho, con razón: “todo es espacio, todo es luz y colorido, elevación de espíritu…”. 

El Salón de Actos fue la otra magnífica obra del citado arquitecto y constructor, digna de competir con las mejores salas de espectáculos de la capital de aquella época. Poseía los adelantos técnicos modernos al ser dotado de un proyector de cine de 35 y 16 mm, gran pantalla y amplio escenario. Su aforo superaba los 500 espectadores.

Fue terminado en 1969 y se inauguró con la proyección de la película “El Cristo negro”. Desde entonces ha sido recinto de aquellos inolvidables cine-forums, numerosas representaciones teatrales, recitales poéticos, actos académicos… y, cómo no, nuestras Fiestas Colegiales anuales.

Cambios académicos de la década de los sesenta

La década de los sesenta supuso también importantes cambios académicos:

Clasificación como Colegio reconocido de Grado Superior (B.O.E. de 20 de julio de1961)

Autorización para impartir las enseñanzas de Bachillerato Laboral Elemental de Modalidad Administrativa a alumnado femenino (O.M. de 9 noviembre de 1965 y B.O.E. de 7 de diciembre de 1965). Este nivel de enseñanza no se llegó a implantar, aunque sí se abrieron dos modernas aulas de Mecanografía y Taquigrafía, obteniendo el título tras superar un examen libre en Madrid.

Impartición de todos los niveles de enseñanza, excepto Preuniversitario:

Párvulos y Estudios Primarios Curso de Ingreso al Bachiller con una prueba global Cuatro cursos de Bachiller Elemental que finalizaban con la temida “Reválida de 4º”. Dos cursos de Bachiller Superior que culminaban en la “Reválida de 6º” y daban acceso a todas las carreras técnicas universitarias.

Los cambios en la sociedad durante la década de los sesenta repercutieron decisivamente en la educación femenina. El Colegio superó las 1.200 alumnas, muchas de las cuales accedieron a Magisterio y a Estudios Universitarios Superiores con gran aprovechamiento: Derecho, Farmacia, Arquitectura, Licenciaturas en Ciencias Químicas, Físicas y Exactas, Licenciaturas en Filosofía y Letras, Música, Ingenierías Técnicas…

El colegio San José y la reforma de los 70

La trayectoria y acogida de su estilo educativo, el crecimiento demográfico o “baby boom” y la ley General de Educación de 1970 abrieron una nueva etapa en la historia del Colegio San José que reestructuró y amplió sus instalaciones y transformó sus enseñanzas:

Quinta ampliación en 1977

El 12 de febrero de 1977 se compra la casa de la calle Audiencia, hoy Elisa Cendreros, por iniciativa de la Superiora Sor Natividad Amatriain. En el solar se construyó, bajo la dirección del arquitecto D. José Manuel Pasarón Piñol y la empresa García del Castillo, el moderno Pabellón de la Natividad, dotado de cuatro plantas destinadas exclusivamente a la labor docente y con acceso a la citada calle. Albergó inicialmente a los dos primeros ciclos de EGB.

Se adaptó a la reforma con la reestructuración y mejora de los pabellones antiguos: aulas, laboratorios al suprimir el internado, nuevo comedor, “Gran Grupo”, etc.

Renovó el plan de estudios de acuerdo con la nueva legislación:

Dos cursos de Preescolar Ocho cursos de Educación General Básica o EGB distribuidos en tres ciclos Tres cursos de Bachillerato Unificado Polivalente o BUP, homologado según el BOE de 27 de agosto de 1975 y adscrito al Instituto Nacional de Bachillerato femenino “Santa María de Alarcos” de Ciudad Real.

Accedió al Concierto Educativo en el nivel obligatorio de EGB según O.M. de 3 de diciembre de 1973, llegando a contar con 25 aulas y mil plazas escolares subvencionadas. La cifra total de alumnas llegó a las 1.600 en el curso escolar 1973/74.

El 29 de septiembre de 1978 obtuvo la autorización del Ministerio de Educación y Ciencia para impartir el Curso de Orientación Universitaria o COU, en sus dos ramas Ciencias y Letras, siendo sólo femenino.

Un año después, 29 de septiembre de 1979, inició un COU mixto y conjunto con el Colegio Nuestra Señora del Prado (Marianistas) de Ciudad Real, experiencia muy fructífera que pervivió hasta 1995.

Se convirtió en Colegio masculino y femenino en todos los niveles desde el curso escolar 1986/87.

1889-1989 CENTENARIO DEL COLEGIO

Inauguración de los actos del Centenario

El día 29 de abril de 1989 se iniciaron las solemnes fiestas del Centenario con una entrevista radiofónica a un grupo de alumnas en las Cadena COPE de Ciudad Real, aunque la apertura oficial no sería hasta el viernes, 5 de mayo, a las 20 horas en el Salón de Actos del Colegio con el emotivo pregón a cargo de D. Carlos Calatayud Maldonado, abogado, personalidad política de Ciudad Real y antiguo alumno. A continuación, Sor Benigna Blázquez Jiménez, Superiora del Colegio, coronó a la alumna Belén Castejón Martín como Reina de las fiestas, acompañada de sus Damas de Honor. 

Programa de fiestas entre la nostalgia, la tradición y la modernidad

Las actividades se prepararon pensando en todos: Hermanas, familias, antiguas y antiguos alumnos, profesores, alumnado actual y personas que de una u otra forma se sentían muy vinculadas al Colegio.

La tradicional “Tómbola” y la Exposición del Centenario con labores y trabajos manuales, muchas fotografías y orlas de promoción, todos los uniformes que han llevado las alumnas desde su fundación, etc.

Convivencia de antiguas y antiguos alumnos con una Eucaristía celebrada por su antiguo capellán D. Narciso Martín de Almagro y en la que no faltaron los “velos blancos”, una chocolatada en el patio del Colegio, un festival artístico amenizado por el grupo Mazantini y una cena en los salones “Zahora”

Jornadas Culturales: Conferencias, mesa redonda, cine-forum, teatro, recitales, competiciones deportivas, concurso de disfraces y día al aire libre en la Atalaya con degustación de platos manchegos

Baile de Gala en el patio colegial, engalanado para la ocasión

Romería organizada por la Asociación de padres de alumnos (APA)

Clausura oficial del Centenario

El sábado, 13 de mayo de 1989, se clausuraron oficialmente los actos del Centenario con un gran festival organizado por las antiguas y antiguos alumnos, la solemne Eucaristía presidida por el Ilmo Sr. Obispo Prior, D. Rafael Torija de la Fuente, armonizada por la Coral Polifónica de Ciudad Real bajo la dirección de D. Pedro Pardo, y, finalmente, un Vino de Honor para los asistentes y un Concierto en el Salón de Actos.

Cien años de historia quedaban atrás. Ahora el Colegio San José iniciaba la última década del siglo XX con nuevos retos.

DE LA ÚLTIMA DÉCADA DEL SIGLO XX HASTA LA ACTUALIDAD: NUEVOS TIEMPOS Y NUEVOS RETOS.

La década de los noventa supuso también importantes cambios académicos. El Colegio San José se prepara para dar respuesta a las modificaciones del sistema educativo contempladas en la LOGSE y a las demandas de una sociedad en constante cambio:

Se adelanta la implantación de la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) en el curso académico 1994/95 y los estudios de EGB van dando paso gradualmente a la nueva Educación Primaria.

Prosigue la tarea de remodelación del edificio: Un nuevo y moderno pabellón, construido el 1998, sustituyó al antiguo en el lado oeste del patio principal y se destinó a albergar las aulas de Educación Primaria. Esta gran obra fue el último legado que Sor Mercedes Castellanos Mesas hizo al Colegio San José.

Inicia el nuevo Bachillerato LOGSE en el curso académico 1997/98 y sigue con brillantes resultados académicos en sus cinco promociones.

En el año 2000 se consigue de la Administración Educativa autorización de ampliación de 3 unidades de Educación Infantil siendo superiora Sor Trinidad del Hierro Morito, y Concierto Educativo para las unidades de 5 años.

Al mismo tiempo, en los últimos años del siglo XX, las Hijas de la Caridad, se anticipan a los cambios sociales que están por venir y, viendo que la falta de vocaciones religiosas es un proceso irreversible, deciden iniciar el camino hacia la incorporación de seglares en su acción evangelizadora, es decir, la Misión compartida. Tienen que asegurarse de que el carácter vicenciano, propio de la acción educativa en el colegio, trascienda más allá del tiempo y las personas que lo dirigen. Para conseguir este objetivo comienzan a trabajar en dos ámbitos formativos: el del carácter propio vicenciano y el de la mejora pedagógica a través de la calidad y la innovación.

En el año 1997 se inicia un programa de formación de seglares, FOEVI, que, en un principio, está destinado a profesores que podrían colaborar en las funciones directivas de los centros pero que más adelante se extenderá a todos los educadores y que se mantendrá hasta el año 2014. Esta formación tiene como objetivo principal el conocimiento del carisma vicenciano a través del estudio de la trayectoria vital de San Vicente de Paul y Santa Luisa de Marillac.

En el curso 1998-99, siendo Superiora S. Mercedes Castellanos Mesas, se incorporan al E. Directivo dos profesoras seglares: Dª Mª Luisa Valls Taberner en representación de E. Infantil y E. Primaria y Dª Mª Jesús Jiménez Retamosa, en representación de ESO y Bachillerato.

En el curso 2004-05, por el gran interés en la búsqueda de la excelencia que caracteriza la labor de Sor Adoración Llorente se inicia un Plan de Calidad externo, primero con la empresa EDUGÉS, que permite medir la mejora de los procesos en que se dividen todas las actividades de un centro educativo, obteniendo la certificación de calidad en julio de 2007 a través de la empresa EDUQATIA. En esos mismos años se produce también un gran avance en la formación en nuevas metodologías por parte de todo el profesorado que desembocará en la aplicación de las mismas en la actualidad.

En los años 2004 y 2005, se producen nuevas incorporaciones de seglares al E. Directivo, D. Jesús de Moya Gargantiel (Jefe de Estudios de E. Secundaria) y Dª Claudia Jurado Rodríguez (Jefa de Estudios de E. Infantil y Primaria.

El proceso de colaboración en la misión compartida es imparable y en estos años, a medida que va disminuyendo el número de hermanas de la comunidad, se van delegando responsabilidades en el profesorado no religioso en forma de coordinadores de cursos, etapas, pastoral, actividades…y se materializa en el curso 2008-2009 con el nombramiento de Directora de ESO y Bachillerato, siendo superiora Sor Rocío Correa Mansilla, de Dª Mª Jesús Jiménez Retamosa.

El 1 de enero de 2015, las Hijas de la Caridad ceden el colegio a la Fundación Educación y Evangelio, FEYE, dirigida entonces por Manuel Barahona Álvarez. Se hace la cesión en usufructo por 30 años, cediendo también el obispado la parte de la edificación del colegio que le pertenece.

En ese mismo año, se hace cargo de la Dirección General del Colegio y representante de la Titularidad Dª Mª Jesús Jiménez Retamosa constituyéndose, por primera vez en 125 años, un E. Directivo en que no hay representación de las Hijas de la Caridad, formado, además, por Dª Claudia Jurado Rodríguez, D. Jesus Alfonso Martín Rodríguez, D. Jordi León López, Dª Isabel Cano Supervía, D. Antonio Martín López y Dª Cristina Medina Laguna. No obstante, las Hijas de la Caridad mantienen en el colegio una pequeña, entrañable y generosa comunidad que colabora con el colegio (en el comedor escolar, en el voluntariado… y en cuantas tareas se les encomiendan) y lo hacen, con la actitud de servicio a los pobres que las definen, hasta diciembre de 2018.

El 27 de enero de 2020, mediante las firmas de Sor Antonia González Granado, Visitadora Provincial las Hijas de la Caridad, D. Gerardo Melgar Viciosa, obispo Prior de Ciudad Real, y Paquita Granda, Secretaria Ejecutiva de la FEYE, las Hijas de la Caridad y el Obispado venden el Colegio San José a la Fundación Educación y Evangelio. En estos momentos el E. Directivo está formado por D. Jesús Alfonso Martín Rodríguez, como director general, D. Jordi León Lozano, Dª Isabel Cano Supervía, Dª Diana Fernández y D. Antonio Martín López. Un equipo plenamente comprometido con el carácter vicenciano  que mantiene nuestras celebraciones y actuaciones en torno las figuras de nuestros fundadores (S. Vicente de Paúl y Sta. Luisa de Marillac) y  que ha recogido muy bien el servicio a los más necesitados de nuestro carisma vicenciano en el valor permanente que representa a todos los colegios de FEYE: SER PARA LOS DEMÁS